Tener un negocio o una pyme puede ser uno de los grandes sueños que estás cumpliendo, pero debes considerar que también implica tener gastos corporativos y ciertas obligaciones fiscales, como es el pago de impuestos empresariales para que todo funcione correctamente.
Si tienes una organización, es importante investigar al respecto, así como conocer los efectos que pueden enfrentarse cuando no se pagan impuestos, además de dar de alta tu negocio en el SAT.
Por ello, traemos para ti la información más importante al respecto para que puedas cumplir con lo correspondiente en tiempo y forma.
Las obligaciones fiscales de una empresa son las siguientes:
Dentro de los impuestos, están:
Este impuesto se deduce de los ingresos que se obtienen por actividades industriales, comerciales, ganaderas o de pesca. Varía según el tipo de ingreso y la cantidad.
Se genera cada vez que se adquiere un bien o servicio.
Se aplica a ciertos productos o servicios que pueden causar un daño o cuyo consumo no es muy recomendable; por ejemplo, tabaco y alcohol.
Son aquellos que se encargan de regular la entrada y salida de mercancías en México, además del transporte y otros temas relacionados con aduana.
Quienes tienen que cubrir este tipo de impuestos son importadores y exportadores de mercancía, propietarios de productos, poseedores de mercancías, destinatarios de productos, apoderados y agentes aduanales.
En México, es uno de los impuestos más comunes a nivel estatal y es muy sencillo de calcular.
Se cobra como un porcentaje de la nómina total y el empleador debe pagarlo. La tasa va del 1% al 3% de los salarios, dependiendo del estado en que se encuentre la empresa.
Corresponde al pago obligatorio que los dueños de un inmueble deben pagar cada año a los gobiernos municipales.
El ISAN es un impuesto al consumo que se relaciona con la venta de automóviles de producción nacional, así como su importación.
Aplica únicamente a aquellas empresas que enajenen automóviles nuevos, y quienes hagan importaciones de autos al país, siempre que sean personas distintas al fabricante.
El valor del ISAN es variable, según el valor del vehículo:
Todos los pagos que te hemos explicado son obligatorios para empresas y pymes.
No cumplir con ellos ni la declaración anual puede traer consecuencias graves, ya que quienes no lo hacen pueden enfrentarse a:
Hay impuestos que aplican a todo tipo de empresas, sin importar su tamaño, como el IVA, el ISR y el IEPS. Estos se clasifican entre mensuales y anuales.
Gran parte de ellos se deben declarar y pagar antes del día 17 de cada mes. Los que aplican para esta regla son: IVA, ISR, IEPS, IGIE y el impuesto de nómina.
Asimismo, cada año deben pagarse los impuestos locales y estatales, al igual que el ISR ya declarado. Si la organización está registrada como persona moral, dicha declaración se debe hacer en el mes de marzo.
En el caso del impuesto predial, se debe cubrir el primer bimestre de cada año.
Cumplir con lo anterior es obligatorio, pero además de eso, tiene grandes ventajas y oportunidades de crecimiento:
Mantenerte al corriente de los pagos de impuestos de tu empresa puede sonar complicado, pero realmente es sencillo con una correcta administración.
Puedes apoyarte de una cuenta de gastos empresariales para estar al día y poder recibir los beneficios.
Gracias a esto, podrás administrar más fácilmente las compras y pagos de tu organización, además de tener mejor control, deducción y comprobación. No solo será útil para cumplir adecuadamente con tus obligaciones fiscales, sino con todo lo demás que repercute en tu negocio.
Como dueño de un negocio o una pyme, es vital conocer y cumplir con los impuestos empresariales, ya que es lo que evitará que tengas que realizar gastos adicionales por pagar multas o recargos o algo peor, ser embargado.
Pensando en eso, en Edenred contamos con una tarjeta de gastos empresariales, que sin duda, te ayudará a realizar todos estos pagos de una forma simple y rápida. Además, te ayuda a agilizar la comprobación de gastos y la deducción de impuestos.
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