El plan de retiro es un elemento muy importante para las personas. Aunque parezca un hecho lejano para gente joven, se tiene que ir preparando, pues te permitirá evaluar objetivamente tu situación económica y tomar buenas decisiones para alcanzar tus objetivos a largo plazo.
Si quieres saber qué es un plan de retiro, su importancia y las mejores técnicas para hacer el tuyo, aquí te explicamos en detalle para que comiences a actuar, y no tengas que preocuparte después.
Un plan de retiro es un método financiero que permite a las personas planificar y asegurar su futuro económico en la vejez, una etapa muy complicada para la mayor parte de la gente, debido a que ya no se tiene un empleo.
El objetivo de esta estrategia es invertir desde edad temprana para garantizar su retiro y bienestar financiero. Lo mejor de todo es que estos planes brindan personalización y flexibilidad, es decir, pueden adaptarse a las necesidades y posibilidades de cada uno.
Un plan de retiro es vital para todos porque te permite estar blindado y asegurar una fuente de ingresos aun cuando ya no tengas la capacidad de trabajar. Podrás estar tranquilo sabiendo que tus necesidades estarán cubiertas siempre.
Otro punto importante de este método es que garantiza que tu dinero o tus ahorros no se devalúen con el paso de los años. Recuerda que el dinero va perdiendo valor e invertir en un plan de retiro asegura que tu poder adquisitivo se mantenga y crezca.
Por tanto, te garantiza:
Comenzar a ahorrar para el retiro desde joven es fundamental, principalmente, por el interés compuesto, que permite que las inversiones crezcan de manera exponencial con el tiempo. Cuanto antes empieces, más tiempo tendrás para crecer tu dinero y acumularás más para el futuro.
Un plan de retiro otorga múltiples beneficios, entre los que destacan:
Ahora que conoces la importancia de contar con un plan de retiro, te diremos cómo puedes diseñar uno con base en tus necesidades y objetivos:
Revisa y analiza qué porcentaje de salario recibirás como pensión cuando te jubiles. Esto te ayudará a saber cuántos ingresos tendrás para gastar cuando termine tu vida laboral sin considerar el plan de retiro.
Es muy importante que evalúes tu situación financiera actual, es decir que consideres ingresos, gastos, deudas y ahorro.
Asimismo, debes considerar tu edad y de cuánto tiempo dispones para ahorrar antes de tu jubilación.
Establece qué metas tienes tanto para antes como para tu jubilación.
Toma en cuenta factores como cuánto dinero necesitas para mantener tu estilo de vida actual, qué tipo de ritmo de vida quieres tener: viajar o establecerte en un espacio fijo, etc.
Tener en claro todos estos elementos te ayudará a determinar cuánto necesitas ahorrar.
Hay diferentes tipos de inversiones y opciones de ahorro que puedes considerar dentro de tu plan de retiro; por ejemplo, fondos de inversión, seguros de retiro, cuentas de ahorro, etc.
Analiza todas las opciones e investiga cuáles se adaptan más a tus metas y objetivos.
En caso de tener dudas, busca guía o asesoría financiera para que puedas tomar las mejores decisiones.
Cuando hayas elegido las opciones de ahorro e inversión que vas a utilizar, es muy importante que hagas un presupuesto y ahorres de forma regular.
De esta forma, tendrás un mejor control de tus gastos y una mayor garantía de que estás destinando el dinero suficiente para alcanzar la meta de retiro.
Tienes que revisar y ajustar tu plan según sea necesario, pues tus metas pueden cambiar con el paso del tiempo.
Asimismo, debes estar atento a los cambios dentro del mercado financiero y realizar cambios en consecuencia. Busca siempre las mejores herramientas del momento, según los rendimientos o ventajas que otorguen.
La ventaja del plan de retiro es que puedes combinar planes de pensión, como el AFORE, y cuentas personales de ahorro de acuerdo con tus posibilidades y objetivos.
Para saber qué hacer, toma en cuenta estos elementos:
Los rendimientos son las ganancias que tendrás al hacer inversiones de capital, es decir, es el porcentaje que crecerá tu dinero de manera anual.
En el caso de las AFORES, estas suelen brindar un rendimiento de entre el 4% y 5%, pero en el caso de las cuentas personales de ahorro esta cifra puede ser mayor, por lo que es clave investigar las diferentes opciones y elegir la mejor.
Es el porcentaje que las operadoras cobran para cubrir los gastos de ejecución, como servicio al cliente, marketing, asesorías, etc.
Las comisiones suelen ser de entre un 0.8% y 1.05%.
Considera todos los servicios que incluye cada opción: operaciones de cuentas, estados de cuenta, constancias, etc.
Asimismo, debes verificar que la institución esté registrada ante la Secretaría de Haciendo y Crédito Público. Solo así pueden ofrecer servicio de manera formal.
Tener un plan de retiro es muy importante y qué mejor que iniciarlo desde joven. Si estás pensándolo, empieza a buscar opciones y elige la mejor de acuerdo con tu perfil personal.
Si bien puede parecer un “gasto”, en realidad es una buena inversión a largo plazo y con el paso del tiempo, valorarás haber empezado desde ya.
¡Establece bases sólidas e inteligentes para prepararte adecuadamente para tu vejez!