Sueldo bruto a neto: cómo calcularlo

Conocer la diferencia entre sueldo bruto y sueldo neto es muy importante cuando se está buscando trabajo para saber exactamente cuánto se percibirá.

Asimismo, es igual de relevante para las empresas, pues garantizar que los colaboradores reciban la compensación adecuada, impactará en el cumplimiento de las leyes, la forma de administrar sus recursos y el correcto desempeño de los mismos. 

 Por ello, en este artículo vamos a abordar ambos conceptos en detalle.

¿Cuál es el sueldo bruto y el neto?

El salario o sueldo es el monto que recibe un colaborador por el trabajo que hace todos los meses, pero para llegar a esa cantidad, hay que distinguir entre sueldo bruto y neto.

El sueldo bruto es la suma que se debe obtener antes de las deducciones impuestas por la ley, como las contribuciones a la seguridad social, la retención de ISR, entre otros. Este se estipula en el contrato laboral y tiene que reflejarse en la nómina. 

El sueldo neto es la cantidad de dinero final que recibe un trabajador como remuneración por su labor. Este puede variar dependiendo de las retenciones que se hagan, ya que no siempre se aplican las mismas.

Por ejemplo, elementos como horas extra, faltas injustificadas o retardos pueden hacer que la cantidad varíe mes a mes. Asimismo, hay que tomar en cuenta que hay diferentes tipos de salario, pero nos centraremos en el fijo, es decir, aquel que se da de forma regular. 

Cómo calcular el salario bruto a neto

Para poder entender cómo se realiza este cálculo, es importante tener en cuenta qué retenciones se pueden aplicar al sueldo bruto y cómo se compone realmente este. 

Así que vayamos por partes para que sea más claro el proceso.

Composición del salario bruto

El sueldo se puede determinar por unidad de tiempo, comisión, obra, etc., y de acuerdo con el artículo 84 de la ley, debe estar conformado por:

• Cuota diaria
• Gratificaciones
• Prima
• Comisiones
• Percepciones
• Habitación
• Prestaciones

Así, tenemos que el sueldo bruto está integrado por el salario base, prestaciones, bonificaciones, horas extra, indemnizaciones y el resto de ingresos. 

Ahora veamos las retenciones que se pueden aplicar.

Retenciones y deducciones al salario

Las deducciones y retenciones al sueldo van a depender del contrato, pero suelen ser las siguientes:

• Seguro social: son las aportaciones que se hacen al IMSS. 

• ISR: este impuesto se aplica directamente sobre las ganancias que una persona física o moral recibe en un tiempo definido.

• Acuerdos colectivos: son las aportaciones que da el trabajador a las cajas de ahorro.

• Pagos a terceros: son deducciones que autoriza el colaborador, por ejemplo, crédito Infonavit. 

• Voluntarias: son las más beneficiosas para los trabajadores, como adelanto de sueldo o préstamos personales de la empresa. 

Cómo deducir las cuotas y aportaciones al IMSS

Las cuotas obrero patronales son la cantidad total que se da al IMSS a partir de una relación laboral, y proviene tanto de los patrones como de los colaboradores, sumado a la cuota que aporta el gobierno de México.

Esta garantiza la seguridad social del empleado, pero también ayuda a su retiro, cesantía y vejez. 

De acuerdo con la ley, la prestación de Seguro Social es obligatoria para todos los trabajadores mexicanos, y las aportaciones deben identificarse en la nómina como “IMSS” o “Seguro Social”. 

Las coberturas que brinda el IMSS son las siguientes:

Riesgo de trabajo

Para esta deducción se tiene que tomar en cuenta el salario base de cotización (SBC) y determinar el tipo de riesgo al que se expone el trabajador para determinar la prima a pagar. 

En este caso, no se deduce nada del salario del colaborador, sino que debe cubrirlo el empleador. 

La clasificación es la siguiente:

• I - 0,54355%
• II - 1,13065%
• III - 2,59840%
• IV - 4,65325%
• V - 7,58875%

Enfermedades y maternidad

Este sirve para brindar cobertura de atención médica-hospitalaria y prestaciones en especie. La cuota fija por prestación en especie es de 20.40% de la UMA mensual y le corresponde al patrón.  

En cuanto al colaborador, para este cálculo, primero tienes que obtener el salario diario y multiplicarlo por la cuota correspondiente, que es del 0.40% solo si se percibe al mes más de tres veces la UMA y se aplica únicamente al excedente. 

Después, multiplica el sueldo bruto por la deducción de gastos médicos, que es de 0.375%.

Lleva a cabo el mismo proceso con el porcentaje correspondiente a prestaciones en dinero, que es del 0.25%. Finalmente, suma todos los resultados y sabrás cuánto le destinas al IMSS.

Invalidez y vida

Se emplea cuando el trabajador sufre un accidente y, en consecuencia, hay incapacidad laboral permanente o fallece. Este seguro es cubierto tanto por el patrón, como por el colaborador. 

Los empleadores deben pagar una cuota de 1.75% del SBC y los trabajadores un 0.625% del SBC. 

Retiro, cesantía en edad avanzada y vejez

El seguro de retiro solo lo cubre el patrón, quien tiene que aportar el 2% del SBC. 

En cuanto a la cesantía en edad avanzada y vejez (CEAV), el empleador debe aportar el 3.150% del SBC, mientras que al colaborador le corresponde el 1.125% de su SBC. 

Este descuento se paga bimestralmente, por eso, se divide en dos para calcular la retención mensual. 

Guarderías y prestaciones sociales

Se brinda a los colaboradores cuando tienen hijos, por lo que el empleador debe aportar un 1% adicional al SBC del colaborador. 

Cómo deducir la retención del ISR

Otra de las retenciones que se aplican sobre el sueldo bruto y que ayudan a conocer el salario neto son los impuestos. En México, el ISR se aplica directamente sobre los ingresos de las personas. 

Para hacer el cálculo, debes revisar las tablas ISR del año en curso en el sitio del SAT. Cuando tengas la información, debes hacer lo siguiente:

• Ubica el sueldo bruto mensual en la tabla correspondiente al “Límite inferior” y “Límite superior”. 
• Resta el Límite inferior al ingreso total. Así tendrás lo que se conoce como base.
• Ubica la tasa correspondiente al rango del salario bruto.
• Calcula el porcentaje de la tasa a la base que obtuviste previamente.
• Al resultado, súmale la Cuota Fija, ubicada en esa misma fila de celdas en la tabla. 

Ejemplo: Si el sueldo bruto es de 15,000 y se le resta el límite inferior de 12,935.83, quedan 2,064.17 (base). 

Esta cantidad se debe multiplicar por la tasa establecida, que es de 17.92%, dando como resultado= 369,89. 

Finalmente, se suma esta cantidad a la cuota fija correspondiente:

2,434.069 + 1,182.88= 3,616.94

Por tanto, el ISR será de 3,616.94. Esta cantidad corresponde al total gravable de la nómina. 

Ejemplo de sueldo bruto a neto

Ahora que tenemos todos los elementos que se deben considerar o, al menos, los más importantes y los que se aplican a todos los casos, veamos un ejemplo de forma mucho más simple:

Supongamos que el Salario Base de Cotización de Roberto es de $320 pesos. 

Roberto hace trabajo de oficina, por lo que se clasifica el riesgo como Clase 1 (0.54355%). 

De esta forma, calculamos la deducción del IMSS en un tiempo de 30 días: 320 x 30= 9,600. Los porcentajes de cada seguro se deben calcular según lo que hemos visto, entonces, así quedaría:

Ahora vayamos al cálculo de ISR:

Al tomar en cuenta todos los elementos que te hemos explicado, podrás obtener tu sueldo neto, es decir, aquel que recibas en tu cuenta bancaria. De esta forma, podrás organizar mejor tus finanzas y hacer rendir tus pagos. 

Por tanto, si el sueldo bruto de Roberto es de $9,600 y se le restan las deducciones e impuesto, estaría percibiendo un sueldo neto de: $8,644.62 

Prestaciones adicionales al sueldo

Si bien el sueldo es uno de los puntos más importantes al momento de elegir un empleo, la realidad es que cada vez más empresas emplean otras herramientas para hacer más atractivo el salario, permitiendo que este se pueda usar íntegramente. 

Vamos a ver algunas de las prestaciones principales, para que analices y veas la posibilidad de implementarlas en tu empresa.

Vales de despensa

Los vales de despensa son un beneficio que algunas empresas brindan a sus colaboradores para ayudarlos a cubrir gastos de primera necesidad, como alimentos y productos básicos.

Estos se suelen otorgar a través de tarjetas y se pueden utilizar en establecimientos afiliados, como supermercados, farmacias, etc. 

Al recibir vales de despensa, los trabajadores aumentan su poder adquisitivo y su salario es más íntegro, pues no tienen que destinarlo a ello, sino a otras necesidades. 

Seguro de vida

Esta prestación da tranquilidad tanto a los colaboradores como a sus seres queridos, pues proporciona una suma asegurada en caso de fallecimiento del empleado, lo que permite proteger económicamente a su familia en momentos tan complicados.

Además de este beneficio principal, algunos seguros de vida pueden incluir coberturas adicionales, como invalidez permanente o enfermedades graves, que dan una mayor protección financiera en caso de situaciones adversas. 

Bono de puntualidad 

Se trata de una gratificación que a veces se da a los trabajadores para reconocer su puntualidad y asistencia. Puede ser una cantidad fija o variable y se suele entregar junto con el salario mensual. 

Esto no solo motiva a los colaboradores a ser más comprometidos, sino que también ayuda a crear un ambiente laboral positivo y promueve la disciplina dentro de la organización.

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Uno de los factores más importantes, sino es que el más importante, al momento de contratar colaboradores para una empresa, es el sueldo neto, pero existen otras variantes que pueden hacer que estos se decidan por una u otra oferta. 

En este sentido, ofrecer prestaciones adicionales, como vales de despensa, puede ser una excelente manera de captar talento y mantenerlo.

Así que si quieres conseguir esto en tu organización, en Edenred podemos ayudarte. Contamos con soluciones que se adaptan a cualquier tipo de negocio. ¡Contáctanos!